Debido a la posibilidad que tiene de invertir su funcionamiento, una bomba de calor puede utilizarse como sistema de calefacción en invierno y de refrigeración en verano, lo cual incrementa su utilidad
Sinaí Romo
Utilizadas para climatizar salas de patinaje, piscinas, refrigeradores, entre otras aplicaciones, las bombas de calor funcionan mediante la explotación de las propiedades físicas de los refrigerantes.
En cuanto a su manera de operar, en el lado del compresor se descarga vapor caliente que se encuentra altamente presurizado y el cual es enfriado mediante un intercambiador de calor (condensador); éste condensa el líquido a una alta presión con temperatura moderada. Posteriormente, el refrigerante pasa a través de un dispositivo de medición.
La baja presión del refrigerante líquido sale del dispositivo de extensión y entra en otro intercambiador de calor (evaporador), en el que el líquido absorbe el calor y hierve. De esta manera, el refrigerante regresa al compresor y el ciclo comienza nuevamente.
La bomba de calor, en determinadas circunstancias, puede actuar de forma reversible, tomando calor de uno u otro alternativamente, mediante el uso de una válvula inversora de ciclo para que así se obtenga calor en invierno y frío en verano.
Ventajas
- Reúne dos funciones en un sólo aparato y en una sola instalación
- Simplifica las instalaciones
- Eficiencia energética
- Mantenimiento simple