Inusual agotamiento del ozono en el ártico

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Científicos del Centro Aeroespacial Alemán (DLR) descubrieron un fuerte e inusual agotamiento del ozono en la región polar del Ártico. Esto luego de verificar los datos arrojados por Tropomi, un instrumento que mide la cantidad de gases traza y aerosoles que afectan el aire del planeta, instalado en el satélite Copernicus Sentinel-5P que se dedica a monitorear la atmósfera.

El agujero de ozono observado este año en el Ártico tiene una extensión máxima de 1 millón de kilómetros cuadrados. “Esto es pequeño en comparación con el agujero antártico, que puede alcanzar un tamaño de alrededor de 20 a 25 millones de kilómetros cuadrados con una duración normal de alrededor de 3 a 4 meses”, comento Diego Loyola, científico del DLR.

Es común que ambos polos sufran pérdidas de ozono durante la época invernal, pero las temperaturas árticas no suelen caer tan bajo como en la Antártida. Sin embargo, este año, los vientos que fluyen alrededor del Polo Norte atraparon aire frío dentro de lo que se conoce como el vórtice polar, un remolino circular de vientos estratosféricos.

La primera luz solar sobre la región inició este agotamiento de ozono inusualmente fuerte, causando la formación del agujero. Éste es impulsado por temperaturas extremadamente frías (por debajo de -80 °C), luz solar, campos de viento y sustancias como los clorofluorocarbonos (CFC).

Datos de la Evaluación científica de 2018 demostraron que la capa de ozono se ha recuperado en algunas partes de la estratósfera a una tasa de 1-3 por ciento por década desde el 2000. Se proyecta que el hemisferio norte y el ozono de latitud media se recuperen alrededor de 2030, el hemisferio sur en 2050 y las regiones polares para 2060.

Las próximas misiones Copernicus Sentinel-4P y Sentinel-5P del programa Copérnico de la UE monitorearán los gases traza clave de la calidad del aire, el ozono estratosférico y los aerosoles, con el fin de proporcionar información sobre la calidad del aire, la radiación solar y el monitoreo del clima.

Fuente: Agencia Espacial Europea